2. Las dos Congregaciones nacen como Familia

“Que esta familia, Jesús mío, que Tú has querido que nazca de la nada, o peor que de la nada, de una pobre criatura que nada ha podido dar, crezca como árbol gigantesco y se extienda por el mundo entero y te dé mucha, muchísima gloria, Jesús mío”[701]

Estando a las súplicas extáticas de la Madre, el nacimiento de las dos Congregaciones tienen un sello peculiar:

- Las dos Congregaciones nacen por deseo explícito de Dios,

- Nacen como Familia

- Nacen de la nada.

“Ayúdales, Jesús mío, y que ellos sin ningún rubor o vergüenza ayuden a sus hermanas a vivir con el espíritu elevado y ellas trabajando como Esclavas tuyas, atiendan a tus Hijos, Hermanos suyos y que esta familia, Jesús mío, que Tú has querido que nazca de la nada, o peor que de la nada, de una pobre criatura que nada ha podido dar, crezca como árbol gigantesco y se extienda por el mundo entero y te dé mucha, muchísima gloria, Jesús mío[702].

Nacen como Familia porque no nacen por un deseo grande de la Madre de trabajar por el reino, sino que tienen su origen en la misma búsqueda de la Madre de la santidad, como premio de su santidad y como bendición por parte de Dios de su deseo de santidad. Dicho con otras palabras, la Familia de A. M. forma parte de la santidad de la Madre: “Quiero vivir para Ti, para los hijos y las hijas, así que unámonos en familia”[703]. “Y que así, Jesús mío, estemos siempre unidos con este lazo de amor[704]

Es una Familia “real”, porque son hermanos “reales”. “Haz, que los hijos e hijas se unan fuertemente como hermanos reales que son, y que, ya unidos, vivan deseando el uno para la otra aquello que es ... todo va para los dos, hazlo, Jesús mío, dales grande paz. Dales una gracia grande para que vivan siempre unidos dándote gloria a Ti y a la Madre, dándote gloria a Ti, ¡hazlo, Jesús mío!”[705]. “

¿Qué Congregación hay que tenga las hijas y los hijos así como los tenemos nosotros) (Dios y la Madre) aquí...? Di, Jesús mío, ¿qué Congregación hay?[706] .

“Ayúdanos a todos para que podamos formar la familia, aunque ayer me dijiste que la estamos formando; no sé si me lo has dicho así para que me callase y no te diese más guerra, o bien porque es verdad[707].

Que hijos e hijas vivan siempre unidos; se traten como verdaderos hermanos y hermanas y que te den tanta satisfacción a Ti, Jesús mío, tanta satisfacción; ¡ayúdanos, ayúdanos, Jesús mío![708]


[701] Pan 22, 433

[702] Pan 22, 433

[703] Pan 22, 548

[704] Pan 22, 758

[705] Pan 22, 950

[706] Pan 22, 963

[707] Pan 22, 1032

[708] Pan 22, 1302